Emilia Pardo Bazán, 1851-1921, está, sin duda, entre los mejores escritores de la Literatura Española. Esta mujer, rebelde, intelectual y contradictoria, buscó siempre su independencia en un mundo mayormente masculino, lo que le costó no poco trabajo y muchas, muchas críticas y desdenes.
LA NIÑA EMILIA
Emilia Pardo Bazán nació en La Coruña (ciudad que aparece en muchas de sus obras con el nombre de Marineda) en 1851. Era hija única de un matrimonio rico y de tendencias liberales. Con tres años ya leía sin grandes problemas. Cuenta en sus Apuntes Autobiográficos de 1866 que la Biblia, La Ilíada o el Quijote eran sus lecturas de cabecera; pero, a escondidas, leía libros considerados entonces como “poco recomendables para señoritas” como las historias románticas de Víctor Hugo o las obras de George Sand.
EMILIA PARDO BAZÁN ESCRITORA
Escribió sus primeros relatos en la adolescencia. Su temprano matrimonio con José Quiroga en 1868 no la detuvo, ni tampoco el nacimiento de sus tres hijos. Ella siempre se negó a seguir los roles impuestos a las mujeres en el siglo XIX y buscó su emancipación e independencia económica con su carrera literaria. Novelas, ensayos, cuentos o artículos en periódicos y revistas son parte de la enorme producción literaria de Emilia; completaba, además, sus actividades dando conferencias en instituciones como el Ateneo. Ella fue responsable de que escritores como Tolstoi y Dostowevsky fueran conocidos en España.
EMILIA PARDO BAZÁN POLÍTICA Y ARISTÓCRATA
En su juventud mostró su simpatía por el Carlismo. Aún siendo católica militante y de ideas conservadoras, siempre mantuvo amistad con muchos intelectuales vinculados a la Institución Libre de Enseñanza, de ideas progresistas. Emilia defendió siempre la igualdad de la mujer siendo especialmente crítica con la pobre educación que ésta recibía; toda su vida fue una feminista convencida que hizo todo lo que pudo por mejorar el nivel cultural de sus contemporáneas.
El Papa concedió a su padre el título de Conde como agradecimiento por su defensa del catolicismo dentro del mundo progresista. Ella misma conseguiría otro título por su labor literaria, concedido esta vez por el rey Alfonso XIII. Tan orgullosa estaba de este reconocimiento que a partir de este momento firmó sus obras como la Condesa de Pardo Bazán.
LOS PAZOS DE ULLOA Y LA MADRE NATURALEZA
Los Pazos de Ulloa y su continuación, La Madre Naturaleza, son las más conocidas y valoradas. La novela comienza cuando el sensible y algo timorato cura Don Julián abandona la ciudad para entrar al servicio del Marqués de Ulloa como capellán. El Marqués vive en un Pazo de la Galicia rural, dominado por sus pasiones y por sus criados. Siguiendo el consejo del cura, el señor de Ulloa emprende la búsqueda de una esposa virtuosa en la ciudad. La elegida es su prima Nucha, sensible y muy religiosa, que vive en el primitivismo de los Pazos su peor pesadilla. La lucha entre la pasión natural y la civilización está servida y tendrá terribles consecuencias para sus protagonistas.
Sobre estas novelas escribió la autora a Clarín, otro grande de las letras: “Yo hago una muy pesada y que dudo que agrade, por ser a la vez muy local y algo teológica… La he escrito con cariño al medio ambiente y con antipatía hacia los personajes”. Se equivocó la Pardo Bazán, porque las novelas fueron un gran éxito desde el principio.
Emilia tocó todo tipo de temas en sus obras, desde el feminismo en la deliciosa Memorias de un Solterón, al cristianismo y los conflictos religiosos en Una Cristiana y su continuación La Prueba o los movimientos políticos y sociales en La Tribuna.
LOS PAZOS DE ULLOA Y LA MADRE NATURALEZA fueron adaptadas en una serie de los años 80.
EMILIA PARDO BAZÁN Y LOS HOMBRES
En 1884 Emilia se separó de su esposo y buscó la libertad en sus viajes a Madrid, Barcelona o París. Se le conoce un amorío con el entonces joven José Lázaro Galdiano, que luego se convertiría en uno de los mejores coleccionistas y editores de España. Según dicen, este affaire pudo inspirar su novela La Insolación. En ella su protagonista, la Marquesa de Andrade, se ve atraída por un joven al que apenas conoce, y se va de marcha con él a la Romería de San Isidro en Madrid. Allí se emborracha y descubre al día siguiente los peligros de una monumental resaca, con la que, de hecho, comienza la novela.
En la Insolación Emilia deja claro que las mujeres son seres de carne y hueso, con las mismas pasiones, aciertos y equivocaciones que los hombres y que no deben ser obligadas a reprimir su verdadera personalidad pues las represiones solo traen problemas y conflictos al final mayores.
Su relación amorosa con Benito Pérez Galdós duró unos dos años, aunque su amistad fue de por vida. Se conservan y están publicadas las cartas que ella le escribió a él.
LAS HAZAÑAS DE EMILIA PARDO BAZAN
Los cuentos y novelas de Emilia son pequeñas joyas que la convierten en una de los grandes de nuestras letras; pero además consiguió obtener una Cátedra en la Universidad, entrar como socia en el Ateneo, impartir conferencias en ésta y otras instituciones; vivir en parte de los ingresos conseguidos por su obra que supo defender y gestionar como empresaria.
Murió en 1921 en Madrid, consciente de su éxito como escritora (y del precio que tuvo que pagar por él) y sin poder cumplir uno de sus sueños. Quizás su espina clavada fue el rechazo que sufrió al no poder entrar en la Real Academia de la Lengua Española.
Aunque quiso ser enterrada en su Pazo de Meirás, sus restos descansan en la cripta de la Iglesia de la Concepción de Madrid.
ALGUNAS PALABRAS Y EXPRESIONES
El desdén es el desprecio o la indiferencia. El verbo es desdeñar
Libro de cabecera, es el libro que uno lee con frecuencia, que vuelve a él una y otra vez. También decimos el “médico de cabecera” como el médico de familia.
El rol impuesto a las mujeres, el rol es el papel, la función que tienen que cumplir en la sociedad. El rol impuesto a las mujeres en la época de Emilia Pardo Bazán era el de madre, esposa virtuosa, o solterona, también virtuosa, siempre dependientes de padres o maridos. Emilia sabía que si quería la independencia tenía que comenzar por ser capaz de vivir de su trabajo.
El Ateneo Científico Literario es una institución creada en el siglo XIX para fomentar la ciencia y la cultura, de corte liberal. Aún se conserva en la calle del Prado de Madrid.
El Carlismo es una tendencia política conservadora opuesta a los movimientos liberales. Liberales y Carlistas libraron varias guerras a lo largo del siglo XIX.
La Institución Libre de Enseñanza fundada en 1876 por Francisco Giner de los Ríos tenía como objetivo mejorar la vida cultural y educativa del país, organizando todo tipo de actividades.
Emilia admiraba el espíritu de la Institución a pesar de no estar siempre de acuerdo con sus ideas.
Una persona timorata es indecisa, algo tímida a veces, que se escandaliza por las cosas que no cuadran con sus convicciones.
Irse de marcha, ir de fiesta a bares, discotecas, salas…
Tener una espina clava es tener un sentimiento de frustración o desencanto por lago que no pudo suceder.